Como fiera perseguida
piso una senda de abrojos,
sin sueño para mis ojos,
ni venda para mi herida;
sin descanso ni guarida,
ni esperanza, ni piedad,
y en fúnebre soledad
a mi dolor amarrado,
voy a la muerte arrastrado
por mi propia tempestad.
R. Gutiérrez,
Lázaro.
piso una senda de abrojos,
sin sueño para mis ojos,
ni venda para mi herida;
sin descanso ni guarida,
ni esperanza, ni piedad,
y en fúnebre soledad
a mi dolor amarrado,
voy a la muerte arrastrado
por mi propia tempestad.
R. Gutiérrez,
Lázaro.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario