jueves, 14 de septiembre de 2017

El Niño prodigioso - Parte 4



El niño, después de haber oído estas palabras, salió de su escondite y dijo a Fedor:
— ¡Bribón! ¡Por mi súplica y por voluntad de Dios, transfórmate en perro!

Y apenas pronunció estas palabras, Fedor se transformó en perro. 

El niño, atándole al cuello una cadena de hierro, se fue con él a casa de su padre.

Una vez allí dijo al comerciante:
— ¿Quieres hacerme el favor de darme unas ascuas?
— ¿Para qué las necesitas?
— Porque tengo que dar de comer al perro.
— ¿Qué dices, niño? — Le contestó el comerciante—. ¿Dónde has visto tú que los perros se alimenten con brasas?
— ¿Y dónde has visto tú que una madre se pueda comer a su hijo? Has de saber que soy tu hijo y que este perro es tu infame mayordomo Fedor, que me robó de tu casa y acusó falsamente a mi madre.

El comerciante quiso conocer todos los detalles, y ya seguro de la inocencia de su mujer, hizo que la pusieran en libertad. Luego se fueron todos a vivir al nuevo reino que había aparecido en la orilla del mar por el deseo del niño.


La hija del zar volvió a vivir en el palacio de su padre y Fedor se quedó en miserable perro hasta su muerte.

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El Niño prodigioso - Parte 3


Al día siguiente, al despertarse el zar, miró por la ventana, y viendo el puente de cristal, preguntó:
— ¿Quién ha construido tal maravilla?
Los cortesanos se enteraron y anunciaron al zar que había sido Fedor.
— Si Fedor es tan hábil — dijo el zar—, le daré por esposa a mi hija.

Con gran rapidez se hicieron todos los preparativos para la boda y casaron a Fedor con la hermosa hija del zar. Una vez instalado Fedor en el palacio del zar, empezó a maltratar al niño; lo hizo criado suyo, lo reñía y pegaba a cada paso, y muchas veces lo dejaba sin comer.

Una noche hablaba Fedor con su mujer, que estaba ya acostada, y el niño, escondido en un rincón oscuro, lloraba silenciosamente con desconsuelo; la hija del zar preguntó a Fedor cuál era la causa de su don maravilloso.
— Si antes sólo eras un pobre mayordomo, ¿cómo conseguiste tantas riquezas? ¿Cómo pudiste en una noche hacer el puente de cristal?
— Todas mis riquezas y mi poder mágico — contestó Fedor— las he obtenido de ese niño que habrás visto siempre conmigo, y que le robé a su padre, mi antiguo amo.
— Cuéntame cómo — dijo la hija del zar.
— Estaba yo de mayordomo en casa de un rico comerciante al que Dios había prometido que tendría un hijo dotado de tal virtud que todo lo que dijera se realizaría y todo lo que pidiese a Dios le sería dado. Por eso, apenas nació el niño yo lo robó, y para que no se sospechase de mí, acusé a la madre diciendo a todos que se había comido a su propio hijo.

El Niño prodigioso - Parte 2


Aquel mismo año la mujer del comerciante dio a luz un hijo, al que bautizaron y pusieron en la cuna. El mayordomo, envidioso de la felicidad ajena y deseoso del mal de su amo, a media noche, cuando todos los de la casa dormían profundamente, cogió un pichón, lo mató, manchó con la sangre la cama, los brazos y la cara de la madre, y robó al niño, dándolo a criar a una mujer de un pueblo lejano.

Por la mañana los padres se despertaron y notaron que su hijo había desaparecido; por más que lo buscaron por todas partes no pudieron encontrarlo. Entonces el astuto mayordomo señaló a la madre como culpable de la desaparición.
— ¡Se lo ha comido su misma madre! — Dijo—. Mira, todavía tiene los brazos y los labios manchados de sangre.

Encolerizado el comerciante, hizo encarcelar a su mujer sin hacer caso de sus protestas de inocencia.

Así transcurrieron algunos años, y entre tanto el niño creció y empezó a correr y a hablar. Fedor se despidió del comerciante, se estableció en un pueblo a la orilla del mar y se llevó al niño a su casa.

Aprovechándose del don divino del niño, le mandaba realizar todos sus caprichos diciéndole:
— Di que quieres esto y lo otro y lo de más allá.
Y apenas el niño pronunciaba su deseo, éste se realizaba al instante.

Al fin un día le dijo:
— Mira, niño, pide a Dios que aparezca aquí un nuevo reino, que desde esta casa hasta el palacio del zar se forme sobre el mar un puente todo de cristal de roca y que la hija del zar se case conmigo.

El niño pidió a Dios lo que Fedor le decía, y en seguida, de una orilla a otra del mar, se extendió un maravilloso puente, todo él de cristal de roca, y apareció una espléndida población con suntuosos palacios de mármol, innumerables iglesias y altos castillos para el zar y su familia.


El Niño prodigioso - Parte 1




Érase un acreditado comerciante que vivía con su mujer y poseía grandes riquezas. Sin embargo, el matrimonio no era feliz porque no tenía hijos, cosa que deseaban ambos ardientemente, y para ello pedían a Dios todos los días que les concediese la gracia de tener un niño que les hiciese muy dichosos, los sostuviera en la vejez y heredase sus bienes y rezase por sus almas después de muertos.

Para agradar a Dios ayudaban a los pobres y desvalidos dándoles limosnas, comida y albergue; además de esto, idearon construir un gran puente a través de una laguna pantanosa próxima al pueblo, para que todas las gentes pudiesen servirse de él y evitarles tener que dar un gran rodeo. El puente costaba mucho dinero; pero a pesar de ello el comerciante llevó a cabo su proyecto y lo concluyó, en su afán de hacer bien a sus semejantes.

Una vez el puente terminado, dijo a su mayordomo Fedor:
— Ve a sentarte debajo del puente, y escucha bien lo que la gente dice de mí.
Fedor se fue, se sentó debajo del puente y se puso a escuchar. 
Pasaban por el puente tres virtuosos ancianos hablando entre sí, y decían:
— ¿Con qué recompensaríamos al hombre que ha mandado construir este puente? Le daremos un hijo que tenga la virtud de que todo lo que diga se cumpla y todo lo que le pida a Dios le sea concedido.

El mayordomo, después de haber oído estas palabras, volvió a casa.
— ¿Qué dice la gente, Fedor? — Le preguntó el comerciante.
— Dicen cosas muy diversas: según unos, haz hecho una obra de caridad construyendo el puente, y según otros, lo has hecho sólo por vanagloria.


Kenny Burrell


  
Guitarrista de jazz y blues, nacido en el año 1931 en Detroit (USA). Comenzó a tocar la guitarra a la edad de 12 años, el  instrumento le fue "prestado"  por su hermano. Sus primeras grandes influencias fueron los grandes guitarristas de la época como  Django Reinhardt, Charlie Christian, Oscar Moore, T-Bone Walker, Muddy Waters y West Montgomery. 

En su familia había varios músicos, su madre tocaba el piano y cantaba en la iglesia Baptista, su padre tocaba el banjo y el ukelele, con estos antecedentes su  carrera  no podía haber ido en otra dirección. 


En 1951 se matricula en la Wayne State Univertsity, mientras realiza sus estudios actúa en numerosos clubs junto con su amigo Tommy Flanagan (piano),  pronto se une al sexteto de Dizzy Gillespie (trompeta) lo que le permite aparecer por primera vez en una grabación discográfica. El combo estaba formado por estrellas del jazz como Milt Jackson (vibrafonista), Percy Heath (contrabajo), John Coltrane (saxofonista), etc .  

Termina su formación en la Wayne State University  con el guitarrista clásico Joe Fava , graduándose  en música y composición en el año 1955. Poco después es  solicitado para actuar en  un concierto en el Carnegie Hall junto con la cantante Billie Holyday, esta actuación esta grabada para la discográfica Verve. Poco tiempo después  se va de gira seis meses con Oscar Peterson ( piano) , al finalizar la gira se traslada junto con Tommy Flanagan a New York, crisol del be-bop.  

Ya en su nuevo destino,  empiezan a actuar asiduamente en locales y clubs llegando a acompañar a Tony Bennett y Lena Horne además de  unirse a diferentes orquestas de Broadway.

Considerado un magnifico músico de estudio y "sideman" colaboró con numerosas formaciones de reconocido prestigio dentro del jazz como los "The Prophets" de Kenny Dorham (trompeta) ó el combo del  organista Jimmie Smith, con este último podemos encontrar varias grabaciones que se encuentran entre lo mejor de la discografía de ambos. 

En 1956 graba su primer álbum como líder "Introducing Kenny Burrell" (1956), durante los siguientes años sigue grabando como líder y a la vez colaborando con diferentes músicos , es destacable el álbum que editó con el titulo "The Cats Featuring Coltrane" (1957)  junto con su amigo Tommy Flanagan y John Coltrane en la formación, si podes no dudes en añadirlo a vuestra discografía. 

Su actividad es abundante durante los siguientes años, y en 1963 edita una de sus mejores grabaciones "Midnight Blues" (1963), este álbum es una de las mejores interpretaciones jazzísticas de blues que podemos escuchar, un clásico imprescindible tanto del jazz como del blues. Sus siguientes álbumes son todos de una gran calidad destacando "Guitar Forms" (1965). 

A principios de 1971 Kenny Burrell impartió varios seminarios de guitarra sin dejar de grabar, fundó la cátedra de  Jazz  en la universidad de Ucla. 

En este segundo video podemos ver un tema en directo junto con otros dos grandes guitarristas, Grant Green y Barney Kessel.





jueves, 7 de septiembre de 2017

FUEGO INTERIOR




Qué es este fuego que emana de mi interior,
que nace en la boca del estómago,
pasa por mi corazón e incendia todo mi alrededor,
es un fuego implacable y atronador como la llamarada de un dragón,
que arrasa todo a su paso,
con el único fin de reunirme con la chica de mis sueños,
la protectora de mi alma y de mi corazón,
que se asemeja las diosas del olimpo tal es su belleza y su fuerza que todos los demás dioses y diosas la temen,
a su vez posee un corazón puro, noble y justo,
capaz de destruir ciudades enteras o replantar campos enteros con un solo movimiento de su cuerpo